Biela y Tierra, Un viaje por la agroecología

Biela y Tierra son Ana Santidrián y Edurne Caballero, dos mujeres que han puesto en marcha un proyecto, un viaje en bicicleta para conocer y difundir iniciativas agroecológicas por el norte de España, además de Aragón y Teruel. Con él quieren dar a conocer iniciativas viables, de muy distinto signo, puestas en marcha en todo el territorio relacionadas con la ecología, la soberanía alimentaria, los eco-feminismos y la movilidad sostenible. No sólo eso, tratarán además de poner en contacto a personas que trabajan en todo el territorio y difundir a los cuatro vientos qué hay en nuestro plato, para que podamos decidir y conocer quién ha producido ese alimento, cómo lo ha producido y quién se está beneficiando

¿De dónde surge Biela y Tierra? Ana y Edurne

La idea surgió por nuestra relación con el mundo rural y con la agricultura en particular. Tanto Edurne como yo (responde Ana) estamos relacionadas con el mundo rural y la agricultura. Edurne trabajaba en una ONG por la soberanía alimentaria y la ecología y mi familia es agricultora (convencional) de toda la vida de un pequeño pueblo de Castilla y León. Por nuestro trabajo conocíamos iniciativas y personas que estaban trabajando día a día por estos entornos y queríamos conocerlos.

Edurne decidió que quería cambiar a aires, de tanta oficina y ordenador y ver de verdad a estas personas que trabajan en el entorno rural. Yo estoy terminando la tesis doctoral y ya tenía en la cabeza que cuando terminara quería cogerme la bici y conocer todo esto que está pasando en la agricultura ecológica, ver proyectos en primera persona y cómo pueden ser viables.

¿Cómo os reunisteis, por qué compartís este viaje?

Somos amigas, fue un día saliendo de clase de salsa, Edurne me comentó que quería dejar el trabajo y hacer un viaje en bicicleta, y yo tenía esa misma idea desde hacía tiempo, a partir de ahí nos pusimos en marcha.

En el viaje os acompaña la Dársena, un estudio de comunicación

Son la tercera pata, Sole y Cris, también amigas nuestras. Les contamos la idea y nos propusieron trasmitirlo, para llegar a más gente y que pudieran conocer todo lo que vamos a visitar. Tenemos una actitud frente a la situación socio económica y medioambiental, y queremos mostrar que hay alternativas reales a día de hoy, viables y alguna de ellas con una larga trayectoria. Trabajar por un mundo rural vivo y un desarrollo sostenible.

Una vez en marcha ¿cuál es vuestra operativa, cómo funcionáis?

Como dice Ana (responde ahora Edurne) somos cuatro, nosotras que pedaleamos y la Dársena que van a trabajar desde el estudio, en Zaragoza, con el material que les vamos enviando. Cuando nos planteamos de qué manera podíamos comunicar, lo hicimos apoyándonos en tres patas: una las alianzas con medios de comunicación, dando visibilidad al proyecto en medios locales y estatales para que expliquen de qué se trata el proyecto y den visibilidad a las iniciativas que vamos a ir visitando; la segunda pata son las redes sociales, facebook, Instagram, youtube y la web. Iremos haciendo entradas diarias en facebook e Instagram y cada poco tiempo iremos colgando los videos con las iniciativas. En la web iremos plasmando reflexiones del viaje. La tercera pata sería en los territorios: charlas y actividades para establecer contacto directo con los distintos territorios que vamos a recorrer.

Una vez en cada sitio ¿cómo os planificáis?

Lo primero fue establecer unos criterios de comunicación profesionales, para lo que nos apoyamos en la Dársena y en Carlos Naya, que nos ayudó con el vídeo de promoción. A partir de ahí nos planteamos realizar tres meses de viaje con treinta iniciativas, pero empezaron a surgir propuestas, lo que nos ha llevado a plantear el viaje para cuatro meses y medio y 105 iniciativas, ha crecido un montón. Pedaleamos y estamos un día en cada sitio, aglutinando iniciativas que estén cercanas. Toda las que vamos a visitar saben la fecha más o menos exacta en que vamos a ir, porque vamos en bici y hay cosas en ese sentido que no podemos controlar. Tenemos pensado hacer entrevistas, talleres, charlas… y conversaciones en las que recogeremos la información y trasladaremos en las reflexiones que hagamos.

¿Cuál es el recorrido que os planteáis?

Sabíamos que la ruta la íbamos a hacer en verano, por lo que nos planeamos recorrer el norte de España, pero surgieron otras posibilidades , que además nos permitían visibilizar territorios que están sufriendo duramente la despoblación, como Castilla o Teruel. Al final vamos a empezar en Zaragoza, de ahí vamos a la zona de Cinco Villas y pasamos a La Ribera de Navarra, donde visitamos Tudela, Arguedas y Sartaguda. Luego iremos hacia La Rioja, Burgos, Palencia, León, Asturias, Cantabria, Euskadi, volvemos a pasar por Navarra, Huesca, Zaragoza y terminamos en Teruel, en las antiguas cuencas mineras, donde hay iniciativas muy chulas relacionadas con la alimentación.

Queremos mostrar esas iniciativas reales a la situación climática y que sirvan de inspiración a la gente. Por eso buscamos iniciativas interesantes y diferentes, desde gente que tiene muchas hectáreas y se dedica a la exportación hasta pequeños agricultores y gente que está empezando. Queremos inspirar y también crear redes, tratar de que surjan colaboraciones. Nosotras somos un mero canal, el protagonismo es de las personas que vamos a visitar.

Ecología, soberanía, feminismo y sostenibilidad…

Si, los ejes en que se basa el proyecto tienen cuatro partes importantes: la ecología, la soberanía alimentaria, los eco-feminismos y la movilidad sostenible. A la hora de seleccionar las iniciativas nos parecía importante visibilizar el papel de las mujeres, porque si en algún mundo ha sido invisibilizado ha sido en el mundo rural. Hemos primado iniciativas lideradas por mujeres. También nos interesa poner en el imaginario colectivo términos como la soberanía alimentaria, trasmitir qué significa, es importante que entendamos qué hay en nuestro plato, que podamos decidir y conocer quién ha producido ese alimento, cómo lo ha producido y quién se está beneficiando. Comemos tres o cinco veces al día y nuestro consumo y alimentación puede ser una herramienta muy potente.

¿Habéis contado con apoyos, con patrocinios?

Para nosotras ha sido importante contar con el apoyo y la complicidad de entidades y organizaciones que nos han permitido poner este proyecto en marcha, como es el caso de CPAEN/NNPEK.